James Aguirre, un ejemplo de disciplina, constancia y amor por el Atlético Bucaramanga

Mi primer encuentro con James Aguirre se remonta a 2010, cuando él tenía tan solo 17 años y yo ejercía como periodista en una radio local. El santandereano ocupaba el puesto de guardameta en el Atlético Bucaramanga, equipo que competía en la segunda división del fútbol colombiano. Desde aquella época, ha defendido los colores del 'auriverde' con pasión y orgullo.

James solía atajar con pantalones largos y ya había destacado en la Selección Juvenil del departamento. Su debut en el primer equipo se debió a lesiones y suspensiones de otros arqueros.

Durante su estancia en el 'Leopardo', James Aguirre ha vivido un constante proceso de aprendizaje. Tuvo la oportunidad de trabajar con Milton Patiño, Carlos 'El Enfermero' Pérez, Nicolás Vikonis y Carlos Chávez, entre otros, quienes contribuyeron de manera significativa al desarrollo de su carrera, compartiendo conocimientos y experiencias.

Recordemos que Patiño fue un histórico campeón con Atlético Nacional, mientras que el uruguayo Vikonis consiguió un título con Millonarios.

En ese tiempo, los periodistas teníamos acceso a todos los entrenamientos, una práctica que hoy en día ya no es común. Esto nos permitió apreciar de cerca el rendimiento de jugadores como Léider Preciado, Jersson González, José Herrera, Hilario Cuenú y Mariano Caporale, entre otros. A pesar de su juventud, James siempre mantuvo una relación respetuosa con el grupo e incluso un papel de liderazgo.

Nunca abandonó su sueño de ver al equipo ascender y finalmente lo logró en 2015. Su conexión con su tierra natal era innegable y, en su vida cotidiana cuando joven, podías encontrarlo disfrutando de una comida en ‘Donde Jean'k’, Cañaveral, o sentado frente a un computador echando el Parley en un Market de la zona.

Su evolución como portero fue excepcional y además se respaldó con una formación académica, algo que pocos futbolistas realizan. Estudió Derecho en la Universidad Autónoma de Bucaramanga, UNAB, y se graduó, demostrando su compromiso tanto en el campo como en las aulas de clase.

Cuando lo entrevistábamos en cabina, con el grupo deportivo donde trabajaba, siempre se mostraba atento y dispuesto a responder las preguntas. Desde el principio, sabíamos que era hijo de James Aguirre Cortés, quien fue extraditado a Estados Unidos por narcotráfico en 2004, pero nunca se le tocó el tema. Lo que realmente nos importaba era su carrera futbolística, ya que los hijos no deben cargar con la culpa de los actos de sus padres.

Recientemente, durante la campaña electoral para la Gobernación de Santander, el candidato Ferley Sierra sacó a relucir esta situación. También a su madre, Mery Luz Hernández, quien se desempeñaba como Secretaria de Cultura del departamento, la acusaron de presuntos casos de corrupción. Sin embargo, es importante destacar que James no tiene ninguna relación con estos asuntos y la justicia es la encargada de determinar cualquier culpabilidad.

En 2023, James se consolidó como el arquero titular del Atlético Bucaramanga, a pesar de su juventud en una posición que a menudo requiere más experiencia. Además, logró el récord de ser el arquero con más apariciones en la historia de la institución.

En la Liga BetPlay, del segundo semestre del año, ha disputado 15 encuentros como titular, y en cuatro de ellos no ha recibido gol, demostrando ser un pilar para el equipo, que actualmente atraviesa momentos difíciles y se encuentra en el puesto 15 de la tabla de posiciones.

A sus 31 años, James aún tiene mucho por demostrar y lograr con el 'Leopardo'. Su historia es un testimonio de disciplina, perseverancia y un amor inquebrantable por su equipo y su tierra.

Déjame conocer tu opinión sobre el rendimiento actual de James Aguirre en los comentarios.